domingo, julio 31, 2011

Aix en Provence




Partimos de Avigñón hacia el sur, a Aix en Provence. Ciudad pequeña donde dicen por acá que es residencia de la aristocracia francesa. Muchos palacios y jardines que eran de nobles, se convirtieron en jardines públicos. Aprovechamos uno de estos parques para pasar el día con uno de los amigos de escuela de Ruy, y no cualquiera, se trata de su mejor amigo. Llantos de los niños al desp
edirse.



Este es el primer viaje con los niños donde realmente entienden lo que pasa a su alrededor, cosa que me tenía preocupado. Supuse que ya no podríamos ir a museos y a todo lo que estábamos acostumbrados antes de los niños; resulta que visitamos el museo de historia natural de la ciudad, donde tienen una exposición de dinosaurios. Los niños estaban maravillados, sin saberlo también tienen varios cráneos de homínidos prehistóricos, de esos que forman la cadena que nos unen a los simios del monolito. Ruy especialmente me pidió que le explicara cada uno de los objetos que vimos, como si yo lo supiera todo. Resulta que el Australopithecus, la Venus de Willendorf y otros objetos en exposición me han cautivado desde niño, cuando quería estudiar algo que tuviera que ver con escarbar las montañas.

Luego visitamos Beau de Provence, una ciudadela medieval impresionante que gracias a la belicosidad
de la gente de antaño quedó inhabitada y medio destruida. Ahora las casas son tiendas de recuerdos, y el castillo solamente piedras. Entramos a la vieja iglesia, y como los niños nunca han tenido contacto con religión alguna no entendieron bien de qué se trataba el asunto. Helena contempló el ataúd de una mujer enterrada hace casi mil años, impactante le resultó que una escultura de una mujer dormida marcara el evento. Traté de explicarle que era una princesa que había muerto. Helena lloró y nos dijo que estaba muy triste. Después de un buen rato de intentar manejar el asunto, Helena decidió realizar un entierro para su coneja de peluche, así que se subió a una de las cuevas de la montaña y acostó al monito. Problema digerido y resuelto.


Mañana salimos hacia París, estamos pensando visitar un parque de diversiones en lugar de el obligado Louvre.


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