Pipe Nui

Hoy tuve dos citas con estudios de audio para iniciar pláticas sobre la parte musical del corto. Las dos opciones suenan bien, ambos son ingenieros de sonido que conocen muy bien su negocio, uno de ellos se interesó sinceramente en el corto y quiere dedicarle tiempo extra al cortometraje y a lo presupuestado.

Resulta que si quiero presentar la animación en festivales de cine aunque sea de los pequeños, debo pagar una certificación THX o al menos Dolby. En México sólamente cinco empresas pueden editar y dar esa certificación. THX es propiedad de George Lucas y yo pensaba que ya le había dado suficiente dinero comprando sus monitos de la guerra de las galaxias cuando niño, y ya un poco más grande las películas en todos sus formatos; videocaset, videocaset mejorado y colección de ultra lujo en DVD. Pues no, no hay forma de no darle dinero al imperio.