sábado, febrero 16, 2008

Un duende

Tenía que pasar. Los días en el estudio trabajando a tiempo completo nos van saturando hasta que llega el viernes, día en que la olla a presión se encuentra al máximo.

Ayer sucedió que un chaneque hizo su aparición, las computadoras comenzaron a fallar al azar. El mentado gnomo se encontraba jalando cables, girando el disco duro de la computadora como un D.J. en antro y el programa de animación comenzó a hacer cambios inesperados; desapareciendo objetos y mostrando las escenas incorrectamente. Tanto Carlos como yo sufrimos el ataque, a mi se me hace que el duende me esta tratando de decir que el fin de semana comienza el viernes.

Etiquetas: