domingo, julio 31, 2005

LA sucks!

Hoy es mi primer día en Los Angeles y el primero de SIGGRAPH, usualmente la únicas actividades existentes son las inscripciones y dar vuelta por el centro de convenciones para descubrir si hay algo nuevo que ver, y lo que descubro es que colocaron la réplica de un X-wing de Star Wars a la entrada, a parte de eso no hay nada nuevo, como siempre esto despierta lentamente.

Para acabarla de amolar, igual que el año pasado, SiGGRAPH coincide con los X-Games. Una especie de convención de adolescentes y adultos en patineta que se reunen a adorar al dios de los patines y bicicletas voladoras. Al lado del centro de convenciones ya colocaron una rampa que mide unos 40 metros de atltura y que servirá para convertir en santos a todo un grupo de chamacos que tienen el mismo aspecto de Nelson, el de Los Simpsons y a Avril Lavinge.

Esta es la primera vez que alguien manifiesta sorpresa con el nombre de Deathfall , en esta ocasión son las ancianas encargadas del registro que dicen que sólamente han escuchado un nombre más raro a un medio internacional a unos noruegos.

Como contaba, hoy estuvo agetreado el día ya que además del viaje, hice mi inscrión como corresponsal de medio y también fui al Best Buy más cercano para comprar una cámara digital. Pensaba ir a Fry's pero simplemente no me daba tiempo, ya que mi intención era ir con Manuel Alducin a ver la película Stealth a los Estudios Universal. Todo bien hasta que vi que el Best Buy más cercano está en Hollywood, que siendo verano y fin de semana está lleno de los peores turistas que existen, los gringos. Después de un metro y caminar varias cuadras me tuve que reponer de un susto que me dió un "memín" que fue violentamente "levantado" de la calle por otro "memín" que viajaba en un taxi.

Hasta ahí no hay problema. La cosa comenzó cuando se me ocurrió la magnífica idea de tomar un autobus que pasa en la esquina del Best Buy y que me deja en el downtown, algo parecido a decir que un bus me deja en Coyoacán, nada preciso. Como ví que el autobus se movía tan rápido como un cojo, decidí bajarme en la primera estación de metro y llegar desde allí a mi hotel, que queda a una cuadra de la estación 7th. Hasta ahí no hay problema, la cosa se puso color de hormiga cuando faltando una estación para llegar a mi hotel se escucha una voz por el altoparlante que dice que por un operativo policial antiterrorista quedaríamos varados un tiempo indefinido, pero que no sería menor a los 10 minutos. "¿10 minutos? eso es más de lo que tardo en llegar caminando" (eso pensé yo y el resto de los pasajeros y nos fuimos caminando). No me acordaba lo largas que podían ser las cuadras en Los Angeles, creánme que mucho.

Finalmente ya no pudimos ir con Manuel a ver la película y mejor nos quedamos viendo las compras del día.