miércoles, julio 27, 2005

Jugando al espía


Hay días en los cuales uno va a una tienda buscando una cosa y sale con otra, hoy es uno de esos. Resulta que fui al Office Depot a comprar materiales para un experimento (que luego comentaré) y me encontré con un WIFI finder. El aparatito es una caja parecida a un control remoto y del tamaño de una tarjeta de crédito, que permite saber si existen redes inalámbricas abiertas en las cercanías. Esto es algo muy útil para nosotros los pránganas tecnológicos que a veces queremos conectarnos a internet cuando andamos de viaje sin tener necesidad de prender la portátil a mitad de la calle.

Este es el tipo de juguetes que uno no necesita para vivir pero que facilitan la vida, especialmente cuando uno se quiere colgar de la red de un Starbucks y poder evadir la mirada molesta de un empleado. El funcionamiento es muy sencillo: el aparato consiste de un botón y tres foquitos (LED), uno resiona el botón y si no encuentra red entonces uno de los focos se pone rojo, en caso de encontrar una red abierta los focos se ponen de color verde y dependiendo de la intensidad de la señal, es el número de focos que se activan.